Doble reaparición en una sola corrida, tras los graves percances sufridos por los toreros Saúl Jiménez Fortes y David Mora en las dos últimas temporadas. Esta ultima reaparición, en la plaza de toros ``Vista alegre´´, en el madrileño barrio de Carabanchel. Una tarde llena de emociones para volver a los toros tras el largo invierno, y a la espera del comienzo de las primeras ferias importantes del año en Castellón, Valencia y Sevilla.
Fue uno de los dos festejos de la nombrada "Feria de Invierno". El otro festejo fue una novillada que se celebró el sábado. Fue una corrida muy emotiva para ambos matadores, que fueron recibidos con una fuerte ovación y obligados a saludar desde el tercio una vez roto el paseillo. La gente tenía ganas de toros y acudió llenando en casi tres cuartas partes los tendidos
En las fotos anteriores se pueden ver las dos graves cogidas sufridas en su momento por ambos matadores. Por suerte esta última vez no ha salido ninguno herido, si bien David Mora en su tercer toro sufrió una fea voltereta sin mayores consecuencias, pero que por un momento encogió el corazón del público al recordar la aciaga tarde de Las ventas en la que David Mora se fue a recibir al toro a portagayola.
David Mora terminó saliendo por la puerta grande con dos orejas, ovacion con aviso y vuelta al ruedo y Saul Jimenez Fortes se fue con tres calurosas y sentidas ovaciones, dos de ellas con un aviso cada una. Lo de menos fueron los trofeos. Lo verdaderamente importante fue comprobar que los dos toreros habían vuelto con las mismas ganas, sabor y torería que siempre han demostrado.
David Mora estuvo toda la tarde a un nivel muy alto. En ningún momento preció que llevara casi dos años sin torear. Toreó con mucho sabor y gusto un buen lote de Parladé, sobre todo el primero y el quinto, un gran toro que permitió disfrutar al torero y al respetable. Lástima de no haber refrendado con la espada la buena faena que hizo. Jimenez Fortes, por su parte, demostró que sigue teniendo un valor a prueba de todo y unas tremendas ganas de ser figura del toreo.
Nos quedamos con la imagen de la reaparición.